La legisladora porteña Lorena Pokoik (FpV) presentó un proyecto de ley para que el pasaje sin denominación ubicado entre las calles Avenida Rivera Indarte y Charrúa (Bajo Flores) lleve el nombre de “Los Auténticos Reyes del Ritmo”, la murga baleada por Gendarmería Nacional el pasado viernes 29 de enero.
El pasaje en cuestión une ambas calles, a la altura 2200, a pocos metros del estadio Pedro Bidegain, donde hace de local San Lorenzo.
El 29 de Enero, gendarmería irrumpió en la Villa 1-11-14 para, supuestamente, recuperar autos robados. En un confuso y violento episodio, hubo balas de goma y tumultos que hirieron a 11 personas, la mayoría de ellos, niños y niñas que se encontraban ensayando con la murga en vísperas del inicio del carnaval. Y el conflicto pasó a ser solo un "enfrentamiento más", del cual no queda clara la razón por la que los uniformados comenzaron a disparar.
Imagénes tomadas del Twitter de | La Garganta Poderosa | (@gargantapodero) |
En este marco la legisladora expresó que: “la reparación no sólo debe correr por la vía judicial sino que también debe ser simbólica y cultural. Además de resarcir a las víctimas, se debe generar conciencia a fin de que hechos de semejante violencia y abuso de autoridad no vuelvan a ocurrir.”
Los Auténticos Reyes del Ritmo se fundó el 11 de enero de este año con la intención de darles a los chicos del barrio Illia 2 la posibilidad de participar en los corsos porteños. El grupo está formado por unas 150 personas, donde el 80% son chicos de 2 a 14 años.
La Legisladora también presentó un requerimiento al Ejecutivo porteño para que se instale en dicho pasaje un sistema de luminaria pública a los efectos de refuncionalizar la zona y mejorar las condiciones de habitabilidad de los vecinos del barrio, puesto que “la violencia institucional en los barrios pobres de la Ciudad no sólo se ejerce por parte de las fuerzas policiales sino que está en cada acción de gobierno que distinga entre ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda”, afirmó Pokoik.
Para finalizar, Pokoik resaltó el valor de las murgas que "cumplen una función social de suma importancia. El sentido de pertenencia y la contención que le ofrecen a niños y adolescentes es fundamental para que éstos no se enfrenten de manera precoz a los peligros que existen en la calle, sobre todo en los barrios postergados.”