Polémica tras polémica, la red de subtes porteña sigue estando en los primeros lugares de la agenda política.
Durante las últimas semanas, el tema principal giró sobre el nuevo aumento que se viene para el pasaje, que pasaría a costar $ 4.50, con la posibilidad de descuentos por cantidad de viajes mensuales (Ver nota 5 de Febrero con el detalle)
En la semana que pasó, el Gobierno Nacional sorprendió con el anuncio de que las líneas de Trenes Mitre y San Martín serían operadas por el grupo Roggio, el mismo que maneja a Metrovías, mientras que las del Belgrano serían controladas por Emepa (Sarmiento quedaría bajo el control estatal)
El hecho de que el grupo Roggio se haga cargo de dos líneas de Trenes - tres, si se suman la Línea Urquiza - que une a la Ciudad con el oeste, San Miguel - generó inmediatas repercusiones en aquellos que denuncian las fallas en el servicio del subterráneo y que además investigan los negocios corruptos y fraudulentos de la firma.
Rafael Gentili, diputado por Proyecto Sur que finalizó su mandato en la Legislatura el pasado mes de diciembre, presentó en diversas ocasiones informes que aclaran el panorama y preocupan.
(Ver informes sobre el déficit de Metrovías y los negocios colaterales)
Alejandro Bodart, que propone la reestatización del transporte público con control social, declaró:"En la Ciudad estamos intentando frenar otro aumento del subte hecho a medida para Roggio y mientras vemos el deterioro del servicio y la falta de inversión y mantenimiento del material rodante, el Gobierno Nacional los premia con la entrega de los trenes Mitre y San Martín".
Y agregó: "El pueblo sigue viajando como ganado en el área metropolitana, pagando millones en subsidios y sufriendo los aumentos del boleto. Acá salta a la vista que tanto Macri como Cristina trabajan para los grupos empresarios, en este caso Roggio".
Respecto al aumento, tras la audiencia pública que se realizó el viernes 7, para debatir este aumento - el cual fue rechazado por grupos vecinales y asociaciones barriales -, la polémica creció.
Marzo iniciará, no solamente con la sesiones ordinarias, sino con mucho debate y, posiblemente, el aumento aplicado.
Durante las últimas semanas, el tema principal giró sobre el nuevo aumento que se viene para el pasaje, que pasaría a costar $ 4.50, con la posibilidad de descuentos por cantidad de viajes mensuales (Ver nota 5 de Febrero con el detalle)
En la semana que pasó, el Gobierno Nacional sorprendió con el anuncio de que las líneas de Trenes Mitre y San Martín serían operadas por el grupo Roggio, el mismo que maneja a Metrovías, mientras que las del Belgrano serían controladas por Emepa (Sarmiento quedaría bajo el control estatal)
El hecho de que el grupo Roggio se haga cargo de dos líneas de Trenes - tres, si se suman la Línea Urquiza - que une a la Ciudad con el oeste, San Miguel - generó inmediatas repercusiones en aquellos que denuncian las fallas en el servicio del subterráneo y que además investigan los negocios corruptos y fraudulentos de la firma.
Rafael Gentili, diputado por Proyecto Sur que finalizó su mandato en la Legislatura el pasado mes de diciembre, presentó en diversas ocasiones informes que aclaran el panorama y preocupan.
(Ver informes sobre el déficit de Metrovías y los negocios colaterales)
Alejandro Bodart, que propone la reestatización del transporte público con control social, declaró:"En la Ciudad estamos intentando frenar otro aumento del subte hecho a medida para Roggio y mientras vemos el deterioro del servicio y la falta de inversión y mantenimiento del material rodante, el Gobierno Nacional los premia con la entrega de los trenes Mitre y San Martín".
Y agregó: "El pueblo sigue viajando como ganado en el área metropolitana, pagando millones en subsidios y sufriendo los aumentos del boleto. Acá salta a la vista que tanto Macri como Cristina trabajan para los grupos empresarios, en este caso Roggio".
Respecto al aumento, tras la audiencia pública que se realizó el viernes 7, para debatir este aumento - el cual fue rechazado por grupos vecinales y asociaciones barriales -, la polémica creció.
Audiencia Pública del 7 de Febrero |
En aquel encuentro, Juan Pablo Piccardo, presidente de SBASE (Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado), aseguró, al igual que el año pasado, que la readecuación tarifaria obedece al "creciente proceso inflacionario", que ocasionó un incremento los costos de explotación de 250 millones de pesos durante el año pasado.
Desde la oposición se remarca en la necesidad de una auditoría externa, de la investigación a Metrovías por cobro indebido de subsidios y, sobre todas las cosas, que se cree que no se escucharán los reclamos de la audiencia.
Entretanto, Bodart realizó la presentación ante la Justicia solicitando ordene al GCBA se abstenga de aumentar la tarifa del subte, toda vez que dicho aumento carece de razonabilidad y resulta totalmente injustificado. Quien deberá resolver tal petición es la Dra. Elena Liberatori a cargo del Juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad Nº 1 Sec 1.
Bodart señala que "De concretarse la tarifa habrá aumentado un 309% en dos años. Este nuevo aumento es un robo a los usuarios para garantizarle una ganancia extraordinaria a la empresa quien este año además recibirá 1030 millones en subsidios. La Auditoria General de la Ciudad ya ha demostrado que todos los costos que presenta Metrovias y Macri para justificarlo son fraudulentos. Si no frenamos estos tarifazos terminaremos con un subte para pocos y de pésima calidad."