Nota: Santiago Arguto
Desde marzo de este año está
funcionando esta escuela infantil pública en el barrio de Parque Patricios. Se trata del primer acuerdo de este
tipo que la capital china (Beijing, también conocida como Pekín) firma con una
ciudad latinoamericana. Gracias a ello se inauguró oficialmente la escuela Nº
11 el lunes 17 de marzo, ubicada en la calle Los Patos 3042.
El establecimiento abrió inicialmente un
anexo especial para niños chinos y argentinos con dos salas de 4 y 5 años.
Básicamente, los chicos que recién empiezan aprenden chino como primera lengua
extranjera y con los años sumarán las materias que son propias de las escuelas
de ese país. Los
alumnos tendrán una carga horaria de idioma chino de seis horas cátedra
semanales para nivel inicial, ocho horas para los alumnos de 1° a 4° grado y
siete horas en 6° y 7° grado.
El objetivo es, a
partir de 2015, lanzar el primer grado de primaria con modalidad bilingüe en
español y chino y, además, a partir de 4° grado se incorporará una segunda
lengua extranjera. De a poco empezaría a funcionar como una escuela primaria,
ya que recién el primer grado existirá en 2015, el segundo en 2016 y así
sucesivamente, a medida que los chicos que empiezan este año en sala de 5 van
avanzando. Otro hecho interesante es que se incorporará material pedagógico
proveniente de la escolarización china, con énfasis en el uso tecnológico.
Las autoridades porteñas
hicieron hincapié en la importancia de que el proyecto “hace a la integración y
a la diversidad que queremos para Buenos Aires” y la ceremonia de apertura
contó con la presencia del embajador de China, Yin Hengmin, quien destacó que el
acuerdo “contribuye y fortalece la integración y la convivencia entre Argentina
y China y es muy importante para las futuras generaciones de ambas naciones”.
El proyecto se desarrolló con la colaboración
de la Comisión de Educación de la ciudad de Beijing y la convocatoria al cuerpo
docente se realizó a través de la embajada de China y el Ministerio de
Educación porteño con la supervisión de docentes chinos que visitaron
regularmente el país. La inmigración china es la cuarta más grande de la
Argentina (después de Paraguay, Bolivia y Perú); y la idea es que también los
alumnos argentinos puedan seguir sus estudios en China si así lo desearan,
luego de terminada la cursada.
La intención del emprendimiento es facilitar
la integración entre niños de ambas nacionalidades y entre ambas culturas, y a
la vez fortalecer las relaciones entre ambas naciones.