La educadora María Bassa fue declarada por la Legislatura porteña como Personalidad Destacada en el ámbito de los Derechos Humanos "debido a su compromiso con los sectores más postergados de nuestra sociedad y por su infatigable trabajo y militancia de más de cincuenta años, principalmente junto a los niños y jóvenes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires".
La entrega del diploma se realizará el lunes 1 de julio a las 17 hs. en el palacio legislativo.
El legislador Julio Raffo (Proyecto Sur), autor de la iniciativa, destacó que su trabajo ha estado vinculado siempre a las problemáticas de los pueblos originarios. Bassa "desde los años '70 vive por opción junto a los más humildes, compartiendo las mismas necesidades y los mismos anhelos".
María se recibió de maestra y luego se graduó como Profesora de historia y geografía; En sus palabras: "cuando me preguntan digo que soy educadora, siempre siguiendo los lineamientos del maestro Paulo Freire de que cada uno pueda sacar lo mejor de sí mismo". También es Profesora de Teología. A lo largo de sus estudios superiores ha participado de diversas formaciones en pedagogía en Madrid, Bruselas, Palestina y Roma.
Trabajo social en Lugano y en provincias
En los años '70 ya vivía en el barrio de Villa Lugano - sector hoy conocido como barrio Fátima - cuando la situación era verdaderamente complicada para aquellos que venían desarrollando un trabajo social, profundizándose aún más con el golpe de estado de 1976.
En este momento María, integrante de la Congregación de Religiosas del Sagrado Corazón a la que pertenece hasta el día de hoy, compartía parte de su trabajo en Lugano con Alice Domont perteneciente a la Congregación de Misioneras Extranjeras (posteriormente desaparecida). Frente al estado de situación deciden, Alice continuar su trabajo en la provincia de Corrientes y María trasladarse al este de la provincia de Salta.
En 1977 se radica en Los Blancos al límite con Formosa, donde vive durante quince años junto a la comunidad Toba. Regresa a Buenos Aires, donde continúa su vínculo con la comunidad Toba de Derqui y se radica definitivamente en el barrio Fátima. Ahí coordina un centro de acción barrial donde se brinda contención y capacitación a niños y jóvenes del barrio y de los alrededores. Cuenta con doce talleres que comprenden diversas actividades, panadería, huerta y una importante biblioteca de referencia para el barrio.
Hoy, la que fuera su casa de la infancia en Llofriu, (Gerona, Cataluña) es una casa de la Cultura y de Actividades Sociales.