En la sesión de hoy, jueves 21 de noviembre, la Legislatura aprobó, en forma unánime, la colocación de mesas ping pong en parques
de la Ciudad.
El original y llamativo proyecto de ley es del legislador PRO, Roberto Quattromano, quien
indicó (Con justa razón) que "el ping
pong es un elemento de inclusión social y, recién ahora, es tomado como un
deporte que en su faceta recreativa posee una capacidad de cohesión familiar y
de carácter transgeneracional".
En varios puntos de la ciudad, crece este singular y divertido deporte, con varias mesas en bares/pubs que, a precios relativamente bajos, invitan a los porteños, en especial los jóvenes, a jugar durante horas, al punto tal que es común la espera de hora, hora y media, para un turno.
El proyecto describe que la
práctica de este deporte mejora la condición física (resistencia, fuerza,
velocidad, elasticidad y movilidad articular). Desarrolla los elementos
psicomotrices básicos de la coordinación y del equilibrio. Mejora la salud
física y psíquica, contribuyendo a un aumento en la calidad de vida. Desarrolla
la capacidad táctica y estrategia y mejora los mecanismos de percepción,
análisis y toma de decisiones.
Las mesas
para la práctica de Ping Pong podrán ser instaladas en parques y plazas que
cuenten con una superficie mayor a los 20.000 metros
cuadrados y que no estén afectadas a distritos APH (áreas de
protección histórica).
Las
fundaciones de la mesa serán puntuales, según los apoyos que tenga cada una de
ellas. No podrán instalarse cerramientos de ningún tipo en su entorno, ni
afectar áreas verdes.
La pregunta a hacerse es: ¿Durarán si las cuidamos al "estilo porteño"?