El jefe de gobierno Mauricio Macri presentó un proyecto de evaluación educativa a la medida de sus criterios selectivos y caprichosos. “Esta propuesta es un engendro neoliberal”.
El texto tiene preferencia para ser tratado el próximo 5 de diciembre y propone crear un Instituto de Evaluación de la Calidad y Equidad Educativa, con autarquía funcional pero cuyo titular será designado en forma directa por el Jefe de Gobierno. (VER NOTA)
“Por ese motivo en 2014 se contempla aumentar un 65% los fondos destinados para el área de evaluación y la voz de Mauricio Macri suena en las radios promocionando una supuesta educación pública, gratuita y de calidad, mientras baja un 1,63% la participación del área en el Presupuesto”.
La norma busca separar los sistemas de evaluación del proceso educativo bajo estándares que lejos están de garantizar la calidad para clasificar las escuelas según un ranking que toma como referencia los criterios de organismos internacionales como la OCDE. Y cabe destacar que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) está compuesta sólo por 34 países, entre los que no se encuentra Argentina.
“Este engendro neoliberal está contagiando la región, curiosamente cuando la experiencia chilena del SIMCE reclama -desde hace dos décadas- un esquema más equilibrado, por los filtros que devienen en un régimen piramidal tendiente a privilegiar los estudios universitarios sólo para quienes pueden pagar por ellos”.
La reciente implementación del Sistema de Inscripciones On Line es sólo el comienzo del plan privatista del macrismo, que ya está “auditando” a quienes tienen más dificultades económicas. De paso, establece límites territoriales con la entrega de vacantes.
A la fecha, Macri se niega a concursar y titularizar a los trabajadores de la Gerencia Operativa que realiza las actuales evaluaciones (Proyecto 1855-D-2013) y se niega a tratar cualquier pedido de informes, como ocurrió en la mencionada reunión de la Comisión.
Estas políticas son la consagración de una concepción elitista y excluyente que deja librado a las fuerzas el devenir del sistema educativo a las fuerzas del mercado. Lamentablemente, el macrismo insiste en el error de repetir recetas rancias.
