6 de abril de 2013

Gentili y el nuevo contrato con Metrovías: “Macri consagra el modelo de impunidad y premia la corrupción del Grupo Roggio”

Diego Adrián Fernandez - 6 de abril de 2013

Rafael Gentili fijó su postura frente a la renovación del contrato de Metrovías que el Gobierno de la Ciudad fijó el día de ayer.



Benito Roggio
El Subterráneo fue centro de debates, polémicas y diversos análisis en estos pocos meses que transcurrieron desde que está bajo la administración porteña. Entre el cierre por dos meses de la línea "A" para la renovación de vagones y las constantes quejas por el servicio deficiente, la empresa Metrovías parece que seguirá gozando de los beneficios de la explotación del transporte, más allá de las denuncias que se han realizado en su contra.

Rafael Gentili, diputado porteño por Proyecto Sur, cuyas denuncias han puesto sobre la mesa el debate acerca de la finalización del contrato, marcó su posición con firmeza, al declarar que “con la renovación de la concesión a Metrovías, Macri consagra el modelo de impunidad y premia la corrupción del Grupo Roggio”.

Hace un par de semanas, Gentili compartió un informe en el que analizó los datos que surgen de la lectura del Balance de 2012 de Metrovías que evidencian que sus pérdidas son un dibujo fenomenal. "Por eso, es imprescindible que el Estado de la Ciudad asuma el servicio a través de una empresa pública con control de los usuarios y participación de los trabajadores e inicie una agresiva política de reducción de costos y recuperación de pasajeros", agregó. 

Rafael Gentili

Además, observó que los pasajeros pagos cayeron en 2012 un 22,35% pasando de 333,51 millones a 255,61 millones, y que el Balance anual demuestra que el Grupo Roggio continúa en la misma senda de fuga de ganancias, y sus supuestos esfuerzos de ahorro no se comprueban realmente.

De todos modos, el contrato firmado entre la Ciudad y Metrovías, cuya duración será de dos años, fija que hay ciertos ingresos que se estatizarán. Esto significa que la empresa no podrá percibirlos. Esto incluye explotación de los ingresos no tarifarios tales como la publicidad, los locales comerciales y la fibra óptica"

El presidente de Sbase, Juan Pablo Piccardo, puntualizó que "es un paso adelante en la gestión del subterráneo para mejorar la seguridad y calidad de servicio al usuario. A partir de ahora el operador se concentrará en la operación de trenes y el mantenimiento, y queda para el estado la explotación de los ingresos no tarifarios así como también todas las obras de mejora y expansión".

Las obras de inversiones en infraestructura y expansiones quedarán a cargo de la Ciudad, no de la empresa.


Al respecto, Gentili expresó que "la estatización de los negocios colaterales no resuelve el problema de fondo que es que se desconoce el costo real de prestar el servicio. El Grupo Roggio aun sin el negocio de la publicidad y los locales comerciales posee una gran cantidad de empresas que le prestan servicios a Metrovías y a través de las cuales capta ganancias extraordinarias la cesión de los túneles a Metrotel (empresa con que los Roggio proveen servicios de telefonía IP e internet a empresas) y el cánon de “asesoramiento” a Metrovías por el que Benito Roggio Transporte S.A cobra el 2,6 % de los ingresos por venta de pasajes”.

Gentili ha investigado al Grupo Roggio y presentó dos informes sobre los negocios de esta concesionaria en los subterráneos (“En todo está Roggio: los negocios colaterales de Metrovías”), los trenes metropolitanos (“Los negocios de UGOFE S.A., El vaciamiento de los ferrocarriles metropolitanos”) y el “Análisis del Balance de Metrovías S.A. al 30/09/2012”. Además, la Comisión Nacional de Valores aceptó investigar a Metrovías a raíz de una denuncia que encabezó el Diputado para que se investigue a la empresa y a su controlante, CLISA S.A.

Este nuevo contrato realmente abre las puertas a un nuevo escenario: El debate tendrá que ser mayor, y el control del estado local sobre la empresa debería agudizarse, independientemente de la percepción generalizada que indica claramente que la empresa Metrovías debería ser removida de cualquier asunto referente al subterráneo. Las pruebas de la ineficacia de su gestión están a la vista.