Nota: Santiago Arguto
En el mes de mayo, Mauricio Macri lanzó su proyecto “Red
de Expresos Regionales” (RER), que sería la obra de transporte de pasajeros más
importante de la historia en la
Ciudad de Buenos Aires, ya que incluiría la ampliación de la
red de ferrocarriles urbanos beneficiando a más de 10 millones de personas.
Esta confluencia de las líneas de ferrocarriles se daría en pleno centro
porteño, más precisamente debajo de la avenida 9 de Julio. Se vincularían 800 km de ferrocarriles con
una infraestructura nueva de 16
km .
Macri hizo la presentación en el auditorio de la
sede del Gobierno porteño, junto al Jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta
y al subsecretario de Transporte, Guillermo Dietrich.
Según el actual jefe de gobierno porteño, este proyecto contaría con el apoyo de organismos de financiación internacional
a tasas ventajosas, debido a su trascendencia social en la ciudad. Los trabajos
se realizarían en mayor proporción en forma subterránea, por lo que tendrían
poco impacto a nivel del suelo, sin provocar dificultades mayores a los
vecinos.
Aparentemente, la obra se dividiría en tres etapas y
tendría un plazo de ejecución total de entre 6 y 8 años. La primera estaría
finalizada en cuatro años y será de alrededor del 70% de los trabajos totales.
Sin embargo, ante el
anuncio de este proyecto, el ministro del Interior y Transporte de la
Argentina, Florencio Randazzo, reaccionó con una serie de críticas mediante la
red social Twitter.
Allí recordó la
promesa incumplida de Mauricio Macri respecto a la construcción de 10
kilómetros de subte por año y el aumento de las tarifas del 300%. También dijo
que el único logro de Macri en transporte fueron los 2,3 kilómetros de Metrobus
en la 9 de Julio. "Nuevamente en campaña vuelve a mentirnos afirmando que
conectará todo el transporte público con 4 pisos de túneles de 16 km. de
extensión", se despachó Randazzo.
Este proyecto se enmarca en el “Plan de Movilidad
Sustentable”, que puso en marcha el gobierno porteño apuntando a “un transporte
público con mejor conectividad, rapidez, economía, comodidad, previsibilidad,
seguridad, equidad, modernidad y sustentabilidad”.
El RER enlazará las líneas ferroviarias que vienen desde
el Sur (Roca y Belgrano Sur), desde el Norte (San Martín y Mitre en sus tres
ramales de Tigre, Suárez y Mitre, y Belgrano Norte), y desde el Oeste
(Sarmiento), generando un nodo de conectividad regional.
La primera etapa de los trabajos prevé la construcción de
una gran Estacion Central en el subsuelo de la Av. 9 de Julio, entre el Obelisco y Av. de Mayo,
con una extensión de 400
metros de largo que integraría físicamente los distintos
transportes disponibles en la Ciudad. Esta
estación estaría dividida en cuatro plantas subterráneas y en una superficie,
el nodo permitiría conectar a los ferrocarriles, el Metrobús, la estación de
combis, los Subterráneos de Buenos Aires y el Sistema de Ecobici, para lo que
se necesitarán 16
kilómetros de túneles. En esta etapa también se
construirá una nueva estación subterránea en Constitución, ubicada muy cerca de
la actual.
En esta red, actualmente se hacen unos 1,4 millones de viajes
diarios y el nuevo sistema de conectividad funcionando a pleno permitirá
duplicar las frecuencias y la cantidad de pasajeros de los ferrocarriles.